Se ha llegado a decir que las vacunas contra el SARS. CoV-2 producen turbo cáncer, algo que no es cierto, porque además el turbo cáncer no existe (ver enlace...👈). No hay mal clínico y hasta psicológico que no le achaquen a dichas vacunas. Lo último es que cambian nuestra personalidad según un inexistente estudio en Corea del Sur (ver enlace...👈).
Según la web Datosmacro, en España se suministraron 105.840.321 vacunas contra el covid-19. Hay vacunadas con las tres dosis 40.739.123 personas, o lo que es lo mismo, el 84,79% de la población española. Con alguna pauta hay 41.325.234 (ver enlace...👈), y en España somos 48 millones de personas. Solo el 15,21% se quedaron sin vacunar. Si las vacunas produjeran todos los males que dicen producir, los hospitales españoles estarían colpasados y las morgues llenas, y más si pensamos que la gente mayor se sigue vacunando del coronavirus.
Es fácil achacarle a la vacuna cualquier mal que aparezca y que no hay aún explicación. Si hay 41 millones de españoles vacunados, cualquier cosa que ocurra con nuestra salud se la podremos achacar a la vacuna. Pero de lo que debemos de preocuparnos realmente, es de los agentes tóxicos que inhalamos sin percatarnos de ello, y esto no es una conspiranoia.
Según La Vanguardia: "Hallan hasta siete ‘tóxicos eternos’ en la sangre de políticos de 12 países europeos"...
... Importantes políticos europeos, algunos de ellos comisarios, europarlamentarios o ministros nacionales, tienen en su sangre hasta siete ‘tóxicos eternos’ o sustancias per y polifluoroalquiladas (PFAS) diferentes, que suponen una “amenaza silenciosa” para la salud pública. La Vanguardia...👈
¿Qué son los PFAS?...
... Los PFAS están en el aire, el polvo, en el agua potable y en alimentos tanto de origen animal como vegetal (ya que multitud de plaguicidas son PFAS). Precisamente, alimentos, agua potable y polvo doméstico son las principales fuentes de exposición para adultos, mientras que el contacto de las manos a la boca con productos de consumo y el polvo doméstico es la fuente más importante para la infancia.
(...) ¿Por qué preocupa esta contaminación? Porque los PFAS están relacionados con graves daños a la salud, con frecuencia a bajas concentraciones, como cáncer, daños en el hígado, el timo y el bazo. También se relacionan con efectos adversos sobre la fertilidad y el desarrollo, efectos neurotóxicos y reducción de la respuesta inmunitaria, enfermedades tiroideas y colesterol elevado. Ecologistas en acción...👈
Esto quiere decir que todo el mundo es víctima en menor o mayor grado de los PFAS. No entiendo como los negacionistas de las vacunas y demás esperpentos terraplanistas, no están denunciando algo real, y siguen inventando historias para no dormir sobre las vacunas, o que desde 12.000 metros los aviones nos están fumigando.
