Ni que decir tiene que Podemos tiene actitudes que, según el punto de vista con que se miren, son dignas de crítica; no vamos a ser tan sectarios. Si queremos criticar a Podemos, hagámoslo. Toda crítica es necesaria y nada ni nadie puede escaparse de ser objeto de debate. Esto es lógico y necesario: "para gusto se hicieron los colores".
Pero la línea que está siguiendo el periódico El País. ya convertido en panfleto de partido, es más que vergonzosa. Se empeñaron en cargarse a Pedro Sánchez, y hasta que no lo consiguieron no pararon. Cebrían debe de sentirse orgulloso por tanto poder acumulado gracias al Régimen del 78. El panfleto de Cebrían dejó de criticar a Podemos con más o menos argumentos y pasó a la acción, convirtiéndose en un medio de desinformación masiva.
Según el diario pseudoizquierdista, la estrategia de Podemos es cargar contra el grupo PRISA. ¡Manda huevos! ¿A donde iremos a parar? Para hacer este tipo de afirmaciones no hay que tener la jeta más dura que el cemento, sencillamente hay que perder toda la vergüenza y pasarse la profesión periodística por los mismísimos cojones.
No hay que ser un lince para saber quien acosa a quien:
Y cuando las malas praxis periodísticas afectan al bolsillo, no tienen más remedio que pedir perdón. Eso sí, por la puerta de atrás: