El coportavoz de Ciudadanos, Edmundo Bal, se dirigía el miércoles a los periodistas en los pasillos del Congreso.CHEMA MOYA (EFE) |
El portavoz adjunto del partido descarta presentarse a las primarias de la formación para ser candidato a las elecciones generales, aunque podría volver a la política con otra formación “liberal”
Virginia Martínez
EL PAÍS
21 abr 2023 - 17:36 UTC
La trayectoria de Edmundo Bal en Ciudadanos tiene los días contados. El portavoz adjunto en el Congreso de CS descarta presentarse a las primarias del partido para ser candidato a las elecciones generales, según ha avanzado el diario digital The Objective y ha confirmado este periódico. El diputado pretende incorporarse de nuevo a su puesto como abogado del Estado, tras haber rechazado varias ofertas en el sector privado, cuando finalice la presente legislatura, según explica el propio Bal. La mayoría de las encuestas indican que la formación aspiraría en este momento como mucho a un escaño en el Congreso de los Diputados. “Nunca he pretendido ser el único diputado de Ciudadanos en el Congreso”, afirma Bal a EL PAÍS por teléfono.
El portavoz adjunto disputó a la nueva dirección el liderazgo del partido en unas primarias embarradas, a las que precedió una guerra interna contra la entonces presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas. Patricia Guasp es hoy la nueva portavoz nacional de CS, pero los estatutos obligan a celebrar nuevas primarias para designar al candidato de Ciudadanos a las elecciones generales previstas para final de año. Pese a la derrota, Bal afirmó en un primer momento que pretendía seguir dando la batalla y ser el número uno del partido al Congreso. Unas aspiraciones que, desde hace unas semanas, empezó a rechazar.
Desde hacía tiempo, Bal fue transmitiendo a su entorno que había cambiado de idea, y ya no pretendía concurrir a las primarias de candidato a las elecciones generales por el mal sabor de boca que le dejó el proceso de elección interno previo para dirigir el partido. Una batalla en la que se enfrentó a la lista apoyada por Arrimadas, en enero, en un proceso duro y cargado de acusaciones entre ambos bandos. La candidatura vencedora fue la encabezada por Patricia Guasp, nueva portavoz nacional de CS gracias al 53% de los apoyos frente al 39% concitados por el abogado del Estado. “Nunca he pretendido ser un diputado del grupo mixto, esa no ha sido nunca mi salida profesional”, subraya el portavoz. Arrimadas sí ha dejado la puerta abierta a presentarse a esas primarias, aun habiendo dejado la presidencia del partido en enero.
En el seno de la nueva dirección tenían claro que Bal volvería a enfrentarse al examen de la militancia en el nuevo proceso que ha de celebrarse después de las elecciones municipales y autonómicas del 28 de mayo y antes de agosto. Una hipótesis ahora descartada. Eso sí, pese a su resistencia a seguir como miembro de la Cámara baja por Ciudadanos, Bal seguirá apoyando al partido. “Quiero participar en la campaña”, añade el portavoz sobre los inminentes comicios de mayo. A su vez, Bal no descarta su regreso a la política en el futuro con otra formación. “Dentro de cuatro años, si surge un partido liberal de centro que me seduzca, podría volver a la política”, asegura, al tiempo que rechaza fichar por otro partido actual, ya sea PSOE o PP. El portavoz mantiene una excelente relación con varios diputados del grupo socialista.
Un grupo parlamentario roto
En octubre se desató una guerra interna entre Arrimadas y Bal por distintas cuestiones. Cinco meses después, las tensiones se han aplacado dentro del grupo parlamentario, aunque hay miembros que ni siquiera se dirigen la palabra. El diputado Guillermo Díaz y la propia Arrimadas van por su lado, mientras que Bal lidera a los otros seis miembros. La comunicación entre ambas facciones es nula, salvo en el caso de la parlamentaria Sara Giménez. Según el entorno de Bal, la nueva ejecutiva trabaja en la buena dirección, pero con poco tiempo y margen para corregir la estrategia, pues las elecciones municipales y autonómicas del 28 de mayo están ya encima.
Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
El portavoz fue captado para Ciudadanos por el anterior líder del partido, Albert Rivera, en 2019, para que ocupara el cuarto puesto en la lista por Madrid en las elecciones generales de ese año. El fichaje fue posible después de que Bal, que dirigió durante 16 años la acción jurídica del Gobierno en causas como la de los Pujol, el procés y la Gürtel, fuera relevado por el Gobierno de Pedro Sánchez en noviembre de 2018 como jefe del departamento penal de la Abogacía del Estado por “pérdida de confianza” tras sus discrepancias en la causa contra los líderes independentistas catalanes. Además, fue el candidato de Ciudadanos a la Asamblea de Madrid en mayo de 2021, cuando el partido pasó de 26 escaños a ninguno en la Cámara autonómica. Una de las tantas debacles electorales que el partido lleva encadenando desde noviembre de 2019 y que, tras el último fiasco en Andalucía, provocaron que Arrimadas iniciara la refundación del partido.